El fotógrafo Santiago Arau ha capturado desde hace 15 años lugares emblemáticos desde tierra y aire

• En la Sala Adamo Boari compartió con el público imágenes de sitios históricos y artísticos que ha captado con cámara y video en el territorio nacional

El director y fotógrafo Santiago Arau, con 15 años de carrera como fotógrafo y cineasta, se ha dedicado a fotografiar “desde el aire y tierra” al país. Las experiencias acumuladas y algunas de las numerosas imágenes capturadas fueron compartidas a través de la conferencia Arquitectura y patrimonio desde el aire, en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes.

Arau comentó que gracias a la fotografía ha desarrollado un proceso de aprendizaje y conocimiento de su propio entorno, de sitios que nunca había visitado o a partir de la búsqueda de los lugares que va a fotografiar.

Durante la conferencia organizada por la Secretaría de Cultura, a través del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), habló de los drones que lo acompañan en sus recorridos aéreos. “Uno de ellos tiene una cámara muy poderosa y unos lentes que se pueden cambiar; el otro es más pequeño y no pesa ni un kilo, con el cual graba video y se controla a partir de una conexión con un control remoto y un teléfono”, explicó Santiago Arau.

El artista mostró varias de sus fotografías para explicar algunas tomas y destacó la importancia de esta herramienta para documentar diversos lugares patrimoniales, los cuales parecen redescubrirse al verlos desde arriba.

En la conferencia, a cargo de la Dirección de Arquitectura y Conservación del Patrimonio Artístico Inmueble, el artista ha registrado sitios en más de 300 localidades de la República Mexicana, entre ellos zonas arqueológicas y monumentos de la época colonial y del México contemporáneo. 

“La importancia de documentar es que la fotografía te habla de un momento preciso; quizás en 100 años, si es que aún los seres humanos seguimos aquí, alguien verá estas imágenes que permitirán descubrir cómo eran las ciudades o determinados lugares”.

Una zona emblemática captada por el lente de Santiago Arau es la frontera, lo que se ha facilitado con el uso de los drones. “La frontera, desde arriba, parecer ser la intervención de un artista, porque se ve como un muro de cobre o de bronce debido a lo oxidado y el sol le añade unas texturas increíbles. Además, por todo lo que representa, me ha interesado mucho trabajar en esta región”.

Comentó que la fotografía aérea en México comienza en 1920 y 1930. El país tiene una tradición fotográfica muy rica, como se puede ver en los archivos que resguarda la Fototeca Nacional, entre ellos el Casasola, que es uno de los más importantes. El artista recomendó ver imágenes constantemente para saber qué es lo que se quiere retratar.

También propuso no preocuparse demasiado por las técnicas fotográficas, porque siguen siendo las mismas y no es necesario romperse mucho la cabeza.

Otro consejo que dio a los asistentes es que siempre procuren dar elementos que sean un referente de la época y el lugar donde se están tomando las fotos, por ejemplo, cuando se quiere registrar un terremoto.

Santiago Arau también habló de la actitud del fotógrafo al documentar un suceso como éste, considerar que hay gente muerta o herida y, por lo tanto, se debe ser respetuoso. “Son imágenes que, sin duda, serán un valioso documento histórico, como las fotografías de los sismos ocurridos en México”.

El también cineasta comentó que ha recorrido muchas ciudades del mundo, pero “México me contiene, nuestro país es muy grande y me interesa documentar las trazas urbanas y sus transformaciones”, agregó.

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