A Poc A Poc llevará la coreografía La fiesta de los bárbaros al Complejo Cultural de Los Pinos
- El montaje reúne danza, música, zanqueros y mojigangas; sábado 21 de septiembre a las 15:00 horas
Una batalla escénica sobre el cuidado de la naturaleza es la que protagonizará la compañía A Poc A Poc mediante el espectáculo La fiesta de los bárbaros que se presentará el sábado 21 de septiembre, a las 15:00 horas, en el Complejo Cultural Los Pinos, como parte de las actividades programadas por la Coordinación Nacional de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).
La obra es una creación del director Jaime Camarena, quien preocupado por el medioambiente quiso contribuir con una coreografía de corte ecológico. Concibió esta pieza a raíz de una visita que hace tiempo realizó a la Costa Chica de Guerrero, en la cual fue testigo de un panorama desolador en el que especies marinas cohabitaban con cientos de botellas de plástico y basura.
Junto con su equipo creativo comenzó a pensar en cómo abordar la difícil tarea de concientizar, a través de un espectáculo para todo público, especialmente quienes no han tenido una educación ambiental.
La pieza relata las aventuras de los bárbaros que son víctimas de la destrucción de su hábitat. Irónicamente luchan por sobrevivir en un ambiente contaminado y hostil creado por ellos. En la batalla que libran para salvar su especie recurren al poder de la danza y otras disciplinas artísticas para combatir la inconsciencia social en torno al cuidado de la naturaleza.
Las principales herramientas de este montaje son: danza, música, zanqueros y mojigangas. El espectáculo —con duración de 50 minutos— comienza con un pasacalle o desfile que sirve para presentar al protagonista: el “monstruo reciclador”, un animal confeccionado con desechos que acopia los residuos que un singular inventor transforma en elementos útiles y divertidos y que los bailarines utilizan como parte de su vestuario o instrumentos musicales. Dicho montaje ha sido creado para presentarse en pasacalles, mercados, ferias, plazas, canchas y todo tipo de espacios al aire libre.
Para Jaime Camarena era un compromiso personal y social plantear esta situación en los escenarios, ya que está convencido que la solución está en manos de todos, no en las de unos cuantos. “La principal aportación de las artes escénicas debe ser la creación de espacios de reflexión que favorezcan la educación y el cambio de costumbres arraigadas. Existe un enorme dispendio y desinformación acerca de qué hacer con nuestros desechos sólidos. El progreso y el desarrollo son imposibles si continuamos haciendo las cosas como siempre se han hecho”, concluyó.
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