La 40 Muestra Nacional de Teatro, diversa, con sentido de comunidad y retroalimentación

• Cinco montajes cerraron el último día de la 40 Muestra Nacional de Teatro en la ciudad de Colima
• El silencio que abrasa, Pulsar, Cómo llegar a Fuenteovejuna, El evangelio según Santa Rita y La tía Mariela fueron las obras que finalizaron una edición más de la MNT

Al finalizar la 40 Muestra Nacional de Teatro, realizada en la ciudad de Colima, el testimonio de una directora y un director experimentados, así como de dos jóvenes participantes y la confluencia artística de todos los involucrados, revelan parte de lo que significó esta reunión de equipos escénicos que ha ponderado lenguajes y temáticas propias, desde valiosas propuestas que reafirman la identidad del teatro mexicano.

Para la directora y actriz yucateca Conchi León, la 40 Muestra Nacional de Teatro fue muy diversa, “integró obras que tienen un gran sentido hacia su comunidad. Creo que algo que ha distinguido a esta muestra es que se hayan incluido artistas que tienen un lenguaje muy particular en sus montajes y eso es muy importante para el quehacer teatral.”

Por su parte, el director de teatro, Otto Minera comentó: “Es importante que la muestra haya llegado a su edición número 40 y que prácticamente en su historia no se ha interrumpido, eso es parte de la salud del teatro mexicano. La muestra es el momento en el que todos nos encontramos, nos preguntamos cómo van las cosas y observamos lo que acontece. Es el encuentro que nos permite mirar de frente el estado del teatro mexicano.”

Enrique, actor de la obra El viaje de los cantores y participante del Programa Jóvenes a la Muestra, expresó: “Es una gran experiencia y una gran retroalimentación, en la muestra observas formas de trabajo que te pueden ayudar para mejorar tus proyectos personales. También para compartir y ser más consciente acerca de tu visión a futuro. Aquí te encuentras con personas maravillosas y su trabajo te motiva para mejorar el tuyo.”

Para Alejandro Muñoz, participante del Programa Jóvenes a la Muestra, la experiencia ha sido muy grata en todos los sentidos: “observar cómo los jóvenes se involucran en el teatro nacional. Las obras en su mayoría han tocado temas en común, pero ha sido interesante ver el reflejo de lo que está pasando en el país y lo que las personas quieren decir.”

Los montajes que culminaron la muestra

El silencio que abrasa de la compañía yucateca Murmurante Producciones, que cuenta con la dramaturgia de Ariadna Medina, Juan de Dios Rath y Noé Morales, fue el montaje que inició el último día de la 40 Muestra Nacional de Teatro  que tuvo lugar en la ciudad de Colima.

En punto de las 13:00 horas en el Teatro Alfonso Michel de la Casa de Cultura,  comenzó la función de dicha puesta en escena que linda entre lo testimonial y lo documental. Bajo la dirección de Juan de Dios Rath, Ariadna Medina, intérprete de la obra, escenificó historias por medio de la construcción de objetos que fueron proyectados a través de un dispositivo multimedia. La creación de imágenes evocó así los recuerdos de personas fallecidas.

La pieza también cuestionó la memoria histórica de las migraciones y exilios que han ocurrido en Yucatán, especialmente con los habitantes del pueblo yaqui, quienes sufrieron los estragos del genocidio y la esclavitud bajo el régimen de Porfirio Díaz a principios del siglo XX.

“Hemos tenido la experiencia de consultar a trabajadores sociales e investigadores acerca de temas como el suicidio y la eutanasia. Tenemos la idea de que el dolor, al igual que la memoria, no tienen un lugar determinado en el cuerpo, ya que es una energía que se materializa en vibraciones corpóreas, como la música”, compartió Juan de Dios Rath, director de escena.

Siguió la escenificación de Pulsar, experiencia escénica para niñas y niños de cero a 3 años de edad, creada por Adrián Hernández y José Agüero, titulares de la compañía Teatro Al Vacío. La obra busca que los bebés desarrollen sus sentidos a través de movimientos sensibles y elementos simples en el escenario. Los actores invitan a las y los pequeños espectadores a una experiencia placentera, sutil, suave y amable a través del tacto.

La obra sucede a nivel del suelo y a partir de la noción de causalidad, los actores intervienen y se relacionan con la materia para transformar el espacio. Dentro del Cedart Juan Rulfo, José Agüero y Alejandro Chávez Flores se encargaron de que las y los pequeños disfrutaran en compañía de sus padres de una maravillosa experiencia.

“Pulsar es la tercera obra que producimos especialmente para niñas y niños   pequeños. La propuesta se basa en el teatro físico, no usamos palabras, todos se crea a partir del trabajo corporal, de movimientos y juegos, un lenguaje que los infantes conocen y viven a diario. El objetivo es generar una experiencia divertida que probablemente será la primera en su tipo que vivirán las y los bebés”, explicó el creador Adrián Hernández.

El Parque de la Piedra Lisa fue sede de Cómo llegar a Fuenteovejuna, obra de las compañías guanajuatenses Lxs de Abajo y Colectivo Alebrije. El espectáculo se realizó al aire libre y el público asistente disfrutó de una colorida marcha hacia la insurrección, cuya razón de ser fue configurándose a lo largo de las estaciones que transitan el elenco y los participantes divididos en dos contingentes: pueblo y Estado. El espacio público fue un escenario donde transeúntes deciden, celebran o cuestionan la caída del tirano y se encuentran con situaciones de celebración, abuso y violencia.

“Es nuestra apropiación del texto de Lope de Vega, una versión que pasa por las vivencias y realidades de la unidad habitacional San Juan de Abajo en el estado de Guanajuato. La obra nos ha permitido explorar con las y los participantes las problemáticas sociales que en su mayoría se enfocan en la violencia de género y que lamentablemente existe en la mayor parte de nuestro país”.   

La obra escrita por Sara Pinedo y Cristian Aravena, bajo la dirección de Pinedo, contó con un amplio elenco integrado por Abraham Servín Rodríguez, Adriana Rodríguez, Ana Gabriela Olmos Blanco, Ana Guadalupe Ruiz Mejía, Ángel Daniel Basaldúa González, Ángeles Mejía, Antonio Arredondo Furcio, Brayan Zavala Villalobos, Daniel Vega Ibarra Cuts, Fernanda Guadalupe Escobedo, Jaime Servín, Jonathan Arredondo, Gabriela Montserrat González, Coco Hernández Martínez, María Soledad Escobedo, Miguel Field Cerna, Miriam Servín Rodríguez, Paola Martínez Guerra, Ulises Mireles y Yuliana Escobedo Hernández.

Ante una gran concurrencia al Teatro Universitario Coronel Pedro Torres Ortiz, se presentó El evangelio según santa Rita, obra de teatro cabaret de la compañía Las Reinas Chulas.

Las risas y los aplausos no cesaron durante el show de la creadora e intérprete Ana Francis Mor. Después de miles de años, por fin llega una versión de la historia de la humanidad donde las mujeres poseen un lugar, tienen voz, piensan, luego existen. El evangelio según santa Rita fue una lectura libre, sin culpas, alegre y desenfadada del libro más antiguo e influyente de nuestra cultura: la Biblia.

“La obra surge a partir de una preocupación propia sobre la confusión que considero existe a partir de los fundamentos y creencias religiosas. A partir de un personaje de mi creación, una virgen religiosa decide bajar del altar para cuestionar sobre política y líderes religiosos. El proyecto se crea a partir de una investigación que realicé durante tres años acerca del significado de la Biblia. Es una crítica a la iglesia como institución”, argumentó Ana Francis Mor, directora y actriz del montaje.

Acompañada por la interpretación musical celestial en vivo a cargo de Las Billies, la creadora juega y divierte al público mientras afirma que Dios no sólo es el primer papá soltero de la historia, sino que su paternidad es tan cuestionada que dan ganas de denunciarlo al DIF. Y ante la falta de estructura dramática, suspenso y mal trazo de los personajes bíblicos, ella reescribe una biblia en la que no hay Liliths expulsadas, Evas castigadas, ni millones de mujeres sin nombre.

La tía Mariela, obra escrita por Conchi León con dirección de Francisco Franco, dio por finalizada la 40 edición de la muestra. En punto de las 21:30 horas se dio tercera llamada para dar inicio a la producción de Aguascalientes.

Con un elenco conformado por Alejandra Ley, Montserrat Marañón, Conchi León, Ana María Espinoza, Ix-chel Muñoz y Margiu Meredith, la obra plantea la historia a partir del fallecimiento de la tía Mariela, madre soltera cuyo mayor temor era que nadie fuera a tirar un puño de tierra a su tumba. Tras recibir la mala noticia, tres de sus sobrinas que no se habían visto en mucho tiempo viajarán para evitar que se cumpla su mayor temor. Entre números musicales y varios momentos de humor, comenzarán a recordar los secretos de familia que todos conocen, pero de los que nadie habla libremente.

“Tres primas se unen para cumplir la última voluntad de su tía recién fallecida. Una obra de mujeres que se cuenta desde el humor yucateco con un cancionero de la región”, dijo la autora y actriz Conchi León.

El espectáculo combinó el realismo mágico, la tradición oral y el teatro musical, una comedia de humor negro que gira en torno al universo femenino. La música interpretada en vivo fue una combinación de arreglos de canciones populares y tradicionales con piezas originales. Con guitarras, violines, un acordeón y un armonio, tres músicos en escena hacen del montaje un espectáculo vital y emocionante.

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