El muralismo mexicano tiene reverberaciones en el arte público de las grandes metrópolis del siglo XXI. Pero el fenómeno se ha extendido también al espacio privado y a los lenguajes abstractos, opuestos a la gran narrativa de la modernidad mexicana del siglo XX. Dos salas aledañas al mural estarán dedicadas a la intervención de artistas que trabajan en ambos modelos: por un lado, el arte callejero con la resignificación de mensajes y el uso semiótico de la tipografía y por el otro, la abstracción de formas y la experimentación del color que integran la herencia del muralismo y de las escuelas de diseño derivadas de la Bauhaus.
Curaduría: Equipo curatorial del MMDR
Artistas: Moza Saracho, Marcos Castro + colectivos