ARTES VISUALES

Juan O’Gorman en el 37 aniversario de su fallecimiento

Boletín No. 68 - 18 de enero de 2019

Hoy, 18 de enero, se cumplen 37 años del fallecimiento de Juan O’Gorman, suceso ocurrido en 1982 al interior su famosa casa funcionalista de San Ángel, al sur de la Ciudad de México. Por ello, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura lo recuerda en esta fecha como uno de los artistas más relevantes e influyentes del siglo XX en México.

Juan O’Gorman, considerado el padre de la arquitectura moderna en México y uno de los grandes muralistas nacionales, nació el 6 de julio de 1905 en la capital del país. Fue el hijo mayor del británico de origen irlandés Cecil Crawford O’Gorman y de Encarnación O’Gorman.

Estudió la preparatoria en la Ciudad de México, donde conoció a Frida Kahlo y entabló una larga amistad con Diego Rivera. Luego ingresó en la carrera de Arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en la que se desarrolló por un tiempo, pero que un día dejó por la pintura de caballete y mural.

Introdujo en México el funcionalismo en la arquitectura, el cual despertó la admiración de personajes como Toyo Ito, quien organizó una muestra del trabajo de O’Gorman en Japón, luego de quedar atónito con la sencillez y belleza de la casa-estudio que hiciera para Diego Rivera y Frida Kahlo, hoy convertida en Museo Casa Estudio y catalogada como Patrimonio de la Nación.

Para la posteridad dejó dos murales: el de la Biblioteca Central de la UNAM, un lugar que figura entre el Patrimonio Cultural de la Humanidad declarado por la Unesco, y La conquista del aire por el hombre que se encuentra en el pasillo principal del Aeropuerto Central de la Ciudad de México, entre otras obras murales y de caballete.

En la pintura, a O’Gorman se le ubica en la cúspide del movimiento y último grande del muralismo mexicano, pues compartía con Rivera, Orozco y Siqueiros la visión de rescatar las raíces mexicanas y la igualdad social como objeto del desarrollo. En vida siempre reconoció la influencia del surrealismo mexicano y las líneas de Remedios Varo y Leonora Carrington.

Por otro lado, en el campo de la arquitectura, O’Gorman seguía la escuela Bauhaus, en especial de Walter Gropius, aunque su más grande influencia fue Le Corbusier, el gran emprendedor de la corriente funcionalista, la cual abogaba por el espacio al servicio de lo funcional, sobre todo para los espacios colectivos, como escuelas, donde lo principal es el desarrollo de una sociedad que no pugna por lo vistoso.

Bajo esa premisa, en 1929 construyó su primera casa funcionalista, junto a los terrenos que hoy ocupa el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), en San Ángel, también pieza maestra de su ideal arquitectónico, levantada entre 1931 y 1932.

Nutrido con las ideas de Le Corbusier a partir de su libro Hacia una arquitectura, donde se refería a la casa como una máquina para vivir, O‘Gorman adaptó la idea a las condiciones que prevalecían en México y asimiló esta corriente de una forma radical en la que procuraba la satisfacción de las necesidades y el máximo aprovechamiento de los recursos económicos.

Las casas fueron heredadas a Ruth Rivera Marín, hija de Diego, quien posteriormente las donó a la Nación, pasando a resguardo y cuidado del INBAL, institución que se planteó la recuperación del inmueble para su restauración, con el proyecto de pasar a formar parte del Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo.

Declarado Patrimonio de la Nación en 1998, este inmueble fue hecho y habitado para el matrimonio formado por Diego Rivera y Frida Kahlo. En 1941, año en que murió Guillermo Kahlo, Frida dejó la casa de San Ángel para regresar a su antiguo hogar en Coyoacán, donde falleció el 13 de julio de 1954. Tres años después, el 24 de noviembre de 1957, Diego dejó de existir en su casa-estudio, rodeado de su obra y sus colecciones de arte.

El Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, formado por las tres casas construidas por Juan O’Gorman, se creó el 21 de abril de 1981, destinado a difundir la obra de cada uno. El 8 de diciembre de 1986 abrió sus puertas al público, en el marco de las celebraciones por el primer centenario del natalicio del pintor y muralista Diego Rivera.

Hoy en día, la casa que habitaba Juan O’Gorman presenta la muestra permanente Las primeras casas funcionalistas de México, formada por documentos, maquetas, fotografías y otros elementos que dan cuenta de la historia del recinto.

Finalmente, en las casas de Diego y Frida se mantiene la exposición permanente El estudio del pintor, formada por piezas prehispánicas y objetos personales de ambos artistas, además de la muestra temporal Escultores en estudio. Apuntes de investigación, conformada por nueve distinguidos escultores procedentes de diferentes lugares de México, quienes compartieron los ideales de estos dos grandes artistas; ésta última permanecerá hasta el 24 de marzo de 2019.

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