ARTES VISUALES

Reflexionan sobre la devastación ecológica en la muestra Río de niebla, Río de adobe, Río de sangre, de Tania Ximena

Boletín No. 1775 - 27 de diciembre de 2023
  • Se analiza la desglaciación del volcán Citlaltépetl, mejor conocido como Pico de Orizaba, y las imágenes se acompañan del sonido editado por Carlos Edelmiro
  • Se podrá ver hasta marzo de 2024 en Ex Teresa Arte Actual

El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), a través del Ex Teresa Arte Actual, invitan a visitar en esta temporada decembrina la muestra Río de niebla, Río de adobe, Río de sangre, de Tania Ximena, muestra que a decir de su curador Michel Blancsubé, cuestiona la época e interroga sobre la fatalidad ecológica que invade nuestra realidad y permea nuestro pensamiento.

La muestra temporal permanecerá abierta al público hasta los primeros días del mes de marzo de 2024, de martes a domingo de 11:00 a 17:00 horas, ubicado en Lic. Verdad núm. 8, Centro Histórico, en el corazón de la Ciudad de México, a un costado del Zócalo.

Tania Ximena adopta la postura de una etnóloga que sale al campo para estudiar una zona geográfica específica, conviviendo con la población que la ocupa.

Los coprotagonistas que acompañan a Tania Ximena son: Guillermo Ontiveros, Memo, glaciólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que estudia la vida y el comportamiento del glaciar. A veces ironiza sobre la futura pérdida de su ocupación y la necesaria reconversión profesional a la que tendrá que someterse tarde o temprano.

Fernando Velázquez vive a orillas del río, en el pueblo de Jamapa, donde se han instalado personas de lejanos orígenes africanos. Fernando es fotógrafo, acumula memoria al recorrer incansablemente el río, y Carmen Toca es una mujer jubilada que ha dejado la Ciudad de México para irse a las costas del Golfo; vive en la desembocadura, al sur de la ciudad de Veracruz, en Boca del Río, donde la gota de agua que comenzó su viaje unos 368 kilómetros más al poniente termina su recorrido.

Tania Ximena registra momentos de la vida de cada una de estas tres personas, editándolos secuencial y fragmentariamente mientras navega de un topónimo a otro. Imágenes grabadas a lo largo del descenso del agua, del hielo a la salmuera, acompañan cada una de sus figuras en sus territorios respectivos.

A través de los retratos de Memo, Fernando y Carmen aparece la imagen del río mismo. El registro del estado de las cosas antes de un cambio anunciado que cuestiona la época e interroga esta fatalidad ecológica que ha invadido nuestras vidas y el pensamiento actual.

También encontramos el tríptico de películas que se sitúa entre ficción y documental, registra acontecimientos, encuentros y secuencias elocuentes de tres conciencias frente a la marcha del tiempo.

Además, tres pinturas de gran formato, producidas ex profeso, traducen de forma estática los tres momentos del río en la nave principal del recinto, tres pinturas más antiguas y registros escultóricos de huellas dejadas por el glaciar al raspar la roca complementan la muestra.

Acompañando las aportaciones de Memo, Fernando y Carmen, y las reflexiones de la autora, está el sonido de la desglaciación, capturado durante años, y editado por el músico Carlos Edelmiro.

De acuerdo con Blancsubé, “una idea aceptada desde la antigüedad, y celebrada, entre otros, por Platón en su Timeo, el agua, junto con la tierra, el aire y el fuego, es uno de los cuatro elementos que componen al ser humano y todo lo que lo rodea. Las aguas del río Jamapa cruzan el estado de Veracruz de oeste a este, provienen del último glaciar del planeta situado a 19° de latitud norte.

“El glaciar Jamapa se encuentra en la cima del volcán Citlaltépetl, mejor conocido como Pico de Orizaba, techo del país, culminando a 5,636 metros sobre el nivel actual del mar. El aumento previsto de este nivel provocará una reducción de la altitud del Pico. Pero hay consecuencias más preocupantes: la cuenca del río va a sufrir cambios drásticos en un futuro próximo —las proyecciones más pesimistas apuntan a que el glaciar Jamapa no existirá como tal por más de diez años.

“La desaparición del glaciar supondrá un cambio socioeconómico radical en el valle que bordea el río, al secarse la fuente principal del río, disminuirá la fertilidad de la tierra, la población se empobrecerá y, en última instancia, emigrará”. Profundas reflexiones que se podrán abordar con la visita a esta muestra que se exhibe hasta el mes de marzo en el Ex Teresa Arte Actual, ¿Cómo podemos intervenir o actuar ante tan aciago panorama en el futuro? Abierta al público en general. Entrada gratuita.