Los Diablos y el Ballet Folklórico de México toman el Palacio de Bellas Artes para celebrar el 90 aniversario del máximo recinto cultural
- La agrupación dancística de Guerrero ofrecerá, acompañada del Ballet de Amalia Hernández, una Gala el 16 de agosto a las 20:00 h, en el marco del Decenio Internacional de los Afrodescendientes
La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), en coordinación con el Ballet Folklórico de México (BFM) de Amalia Hernández, presentarán la Gala Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández con Los Diablos de Cuajinicuilapa, el viernes 16 de agosto de 2024, a las 20:00 h en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.
La directora general del Inbal, Lucina Jiménez López, el director del BFM, Salvador López, y José Roberto Dámaso, director de los Diablos de Cuajinicuilapa, anunciaron la presentación del Ballet Folklórico de México con Los Diablos de Cuajinicuilapa en el marco de los 90 años del Palacio de Bellas Artes y del Decenio Internacional de los Afrodescendientes.
“Que Los Diablos tomen el Palacio de Bellas Artes nos parece fundamental y qué mejor que hacerlo precisamente de la mano del Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández. Esto nos enorgullece y nos habla de la posibilidad de que el reconocimiento a la diversidad cultural de México en su máxima expresión es posible”, dijo la directora general.
Durante la conferencia de prensa en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes, la titular del Inbal destacó la importancia de esta expresión de la herencia afromexicana, y sobre todo que se presente en el Palacio de Bellas Artes.
La danza de Los Diablos está presente en Perú, en Cuba, en toda la Costa Chica de Guerrero y Oaxaca, y creo que esto nos hermana, y lo subrayo especialmente porque el Inbal, en el marco de la celebración por los 90 años del Palacio de Bellas Artes, decide sumarse al Decenio Internacional de las Afrodescendencias, movimiento mundial que está buscando devolver ese reconocimiento a los pueblos, a las tradiciones y a las culturas afro que todas y todos en realidad tenemos.
“Y es una manera también de señalar que nuestras culturas vivas que expresan la diversidad de México están presentes en el máximo recinto del arte y la cultura de México”, agregó Jiménez López este martes 6 de agosto.
Al agradecer al director artístico del Ballet Folklórico de México, Salvador López, por aceptar la presentación en conjunto con Los Diablos, consideró que en realidad es hacerle homenaje a una metodología con la cual Amalia Hernández forjó el gran Ballet Folklórico de México.
Durante la presentación de la Gala, la titular del Inbal explicó que Cuajinicuilapa, esa perla negra que en realidad es asiento de las culturas afromexicanas e indígenas que en su momento fue declarada también sitio de memoria de la esclavitud de las poblaciones afrodescendientes, “es un lugar donde se desarrollan de manera activa y permanente unas tradiciones que están vivas”.
Mencionó que se habla de una tradición vigente, fuerte, contemporánea, absolutamente arraigada a la vida de los pueblos, y además en sus espacios celebratorios donde Los Diablos emergen y aparecen por todos lados, exorcizando y en búsqueda también de reconocimiento de libertad y de resistencia.
Para la titular del Inbal, con esta presentación se cumple con un compromiso: “En 2022 creamos, con la Secretaría de Cultura de Guerrero, el Festival Afromexicano, nuestra raíz, el cual se llevó a cabo por primera vez y se dejó instituido en un decreto que le da permanencia en el estado de Guerrero, mismo que nació en Cuajinicuilapa, donde acudió la Escuela Nacional de Danza Folklórica -del Inbal-, haciendo un diálogo con las danzas tradicionales de la zona, en un ejercicio de integración muy importante”.
Recordó que en el 2023 a este proyecto se sumó la invitación que hizo la Coordinación Nacional de Literatura a destacadas escritoras afromexicanas, activistas por la defensa de los derechos de las poblaciones afrodescendientes… Ahí nos comprometimos a que en la edición 2024 habría un intercambio y que Los Diablos vinieran al Palacio de Bellas Artes”.
Salvador López, director de la agrupación y nieto de la destacada coreógrafa, resaltó que el intercambio con los bailarines guerrerenses reavivó la manera en que Amalia Hernández trabajó con los pueblos originarios: “Cuando la directora, Lucina Jiménez, nos propuso que desarrolláramos este proyecto con Los Diablos de Cuajinicuilapa me pareció no solamente interesante, sino que es retomar la esencia del trabajo del ballet”.
Adelantó que esta presentación, la cual contará con más de 120 bailarines en escena, así como la participación de músicos tradicionales en vivo, como la Banda de Mi Tierra, el Ballet Folklórico está preparando cuadros dedicados a los bailes y tradiciones de Guerrero: “Será una enorme oportunidad para presenciar una de las tradiciones vivas de esta Costa más importante que tenemos hoy. Más allá del esfuerzo que hace el Ballet, agradezco esta enorme oportunidad para participar en las festividades por el 90 aniversario del PBA, con un proyecto junto a Los Diablos de Cuajinicuilapa”.
José Roberto Dámaso, director de la agrupación guerrerense, explicó que para él es un orgullo que esta danza afromexicana se presente en el máximo recinto cultural del país, como una demostración de justicia y reconocimiento a sus tradiciones: “Todos estos lugares mágicos de la Costa Chica de Guerrero están llenos de riqueza cultural. Vamos a venir con el corazón, a entregarlo aquí, al escenario de Bellas Artes, para mostrar la danza de Los Diablos, en un momento en que se le está dando importancia a la tercera raíz, a la cuestión afromexicana.
“Para mí es un honor estar en estos grandes escenarios y es satisfacción para toda la gente de la Costa Chica, porque finalmente nos voltean a ver”, dijo al detallar que esta danza se baila originalmente con 12 pares, es decir, 24 diablos de diversas edades, desde adultos hasta jóvenes, quienes tomarán la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.
Explicó que esta danza estuvo dedicada al dios africano Ruja y fue mantenida por los esclavos africanos y, posteriormente, se convirtió en parte de los festejos del Día de Muertos, en los que cada barrio organiza su propia representación y recorren las calles hasta los panteones, pero también se baila los días 12 de diciembre, en homenaje a la Virgen de Guadalupe.
Añadió que para la presentación en el PBA se conservarán todos los elementos tradicionales, como las vestimentas negras, pero destacó la importancia de las máscaras: “Son totalmente negras, cada danzante hace su propia máscara de acuerdo con sus posibilidades, pueden tener cuernos de venado, vaca, toro, chivo, incluso madera o corteza de árbol, y llevar piel de cocodrilo; llegan a pesar de dos a nueve kilos y arrastrar largas crines”, lo cual, dijo, es un reto para el bailarín.