El Laboratorio de Danza Contemporánea del Ceprodac abre espacio de conocimiento a estudiantes y bailarines

• La colaboración interinstitucional permitió intercambiar técnicas de entrenamiento y el proceso de creación, en el Jardín Escénico del CCB

El Centro de Producción de Danza Contemporánea (Ceprodac) del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) compartió el Laboratorio de Danza Contemporánea en el cual estudiantes de la Academia de la Danza Mexicana (ADM) participaron en una clase de entrenamiento al lado de la Compañía de Danza del Estado de México, lo que permitió una experiencia única en la que se enriqueció su conocimiento y lenguaje expresivo a través de la impartición de diversas técnicas y estilos dancísticos.

La sesión, realizada en el Jardín Escénico del Centro Cultural del Bosque estuvo a cargo del maestro cubano Jasmany Hernández, director de la Compañía de Danza del Estado de México, graduado de la Escuela Nacional de Ballet de Cuba, e integró técnica clásica de ballet, estructurada en la metodología de la escuela cubana, bajo tres etapas: la primera con ejercicios en barra que prepararon al cuerpo de los participantes para su control y realización de movimientos espaciales en el centro.

Continuó con repeticiones de saltos pequeños y medianos, y ejercicios de batería y reforzamiento del allegro, para finalmente avanzar en la complejidad, con movimientos dinámicos con los que se buscó potencializar la energía de los bailarines. La segunda parte integró el proceso de creación y los ensayos del programa coreográfico realizado dentro del estilo que cada agrupación maneja.

Por su parte, la directora del Ceprodac, Cecilia Lugo, señaló que la actividad se inscribe dentro del programa Un día en la vida del Centro de Producción de Danza Contemporánea que se realiza con la idea de que este centro tenga vinculación con escuelas profesionales de danza del Inbal y de otras instituciones, y se incorporen para tomar una clase de alto nivel, además de que está abierto al público como observador.

Aseguró que es fundamental que el alumno siempre esté abierto a nuevas técnicas y formas dancísticas que lo enriquezcan y mantengan actualizado. “Un pensamiento contemporáneo no es el que se cierra en una idea, sino que se abre y bebe de los clásicos y los contemporáneos, en un espacio de creación nueva, contemporánea y vanguardista; atrás de nosotros hay mucha historia y sabiduría que uno tiene que tomar y sumar”.

Miguel Ángel Linares, alumno del tercer año de la Licenciatura en Danza Contemporánea de la ADM, afirmó que se trató de una experiencia agradable que integró no solo la combinación de técnicas, sino que permitió trabajar con lo que cada uno tiene. “Fue una experiencia enriquecedora para alumnos que aspiramos a formar parte de alguna compañía”.

Por su parte, Sergio Orozco, bailarín de la Compañía de Danza del Estado de México, consideró que la clase fue un momento grato en el que pudo convivir con varios compañeros de formación. “Es bueno que se abran estos espacios de interconexión para reconectar con los amigos y ver cómo han evolucionado, además de visualizar cómo uno ha cambiado”.