El Museo Nacional de San Carlos recibe a su público con nueva relectura de su colección con Tradición, reforma y vanguardia

• Reúne más de 100 obras pertenecientes a las escuelas italiana, francesa, española y flamenca, además de piezas de artistas mexicanos

Una de las colecciones más amplias de arte europeo en México y Latinoamérica, la cual resguarda el Museo Nacional de San Carlos (MNSC), del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), ofrece una nueva relectura de sus piezas a través de la exposición Tradición, reforma y vanguardia. Colección MNSC, con la cual el público visitante podrá descubrir cerca de 600 años de historia artística a través de sus cambios y continuidades.

Abierta desde el pasado 17 de julio, el recorrido reúne más de 100 obras pertenecientes a las escuelas italiana, francesa, española, pero también a la flamenca, la cual se desarrolló en países del norte de Europa, así como artistas mexicanos, a través de las cuales se muestra cómo, a pesar de las rupturas en cuanto a ideales y visión estética, diversas corrientes del arte convivieron y dialogaron.

La exposición inicia con una de las transiciones históricas más profundas del mundo occidental, “Renacimiento”, época en que continúa una tradición artística influenciada por la teología cristiana, como muestra el óleo La Virgen enseñando a escribir al niño Jesús (ca. 1510) de El Divino Luis de Morales, pero también ve el renacer del arte grecorromano, con piezas como El rapto de Proserpina (s. XVII), realizada dentro del círculo de Pieter Paul Rubens, que abordaron sus mitos y temas.

Uno de los grandes cismas del mundo católico, la Reforma, que también influenció el terreno artístico, se presenta con el núcleo Reformar el arte, destruir la idolatría, época en la que no solo hubo más control sobre la manera de abordar los temas religiosos en el arte, sino ganó popularidad otro tipo de representaciones: naturalezas muertas, retratos o escenas de género que reflejaron el cotidiano, como en Ruinas con rebaños (s. XVII) de autor no identificado.

La galantería y sensualidad en obras como La coqueta y el jovenzuelo (s. XVIII), de Jean Honoré Fragonard, u Odalisca (Desnudo de madame Pompadour, ca. 1850), de Édouard Henri-Théophile Pringret, muestran cómo el género de la “fiesta galante”, nombrado así por el pintor Antoine Watteau y que se desarrolló en Francia a principios del siglo XVIII, desplazó géneros tradicionales a favor de una pintura más decorativa, lo cual se aprecia en el núcleo Arte francés: rector del buen gusto, la razón y la galantería.

Con el inicio de la Revolución Francesa, en 1789, nuevos valores se integraron a la vida social de Europa, que se reflejaron en lo cultural, dando paso a una nueva etapa: el Romanticismo. A través de piezas como El avaro (s. XVII) de Jean-Raymond Hippolyte, cuyo protagonista sostiene una mirada que expresa locura y horror, pero también lo sobrenatural y la violencia, se ejemplifica, en el núcleo Explosiones de las pasiones y nostalgia por el pasado.

Obras poco conocidas de la colección y que sirvieron como referentes de aprendizaje llegaron a México en el siglo XIX, como Episodio del diluvio universal (ca. 1850) de Francesco Coghetti, óleo enviado por el artista a la Real Academia de San Carlos en 1853, época en que la institución adquirió un gran número de piezas europeas que hoy son parte del acervo del recinto del INBAL.

La exposición cierra con el núcleo Modernidad, la cual muestra cómo los artistas simbolistas de finales del siglo XIX e inicios del XX renovaron el arte romántico a favor de representaciones más subjetivas, donde nada es lo que parece, como se observa en la obra de los franceses Jean Béraud, con Arlequín (1891) y Anto Carte, La barca negra (1921), pero también de mexicanos como Germán Gedovius, de quien se presentan algunos retratos (La niña ,1905).

Con esta exposición, además de conocer diversas etapas del arte y su contexto histórico, el público podrá encontrar, en cuanto al tratamiento de los temas, el manejo de los espacios, los colores, las telas, incluso, la manera de expresar los rostros, gran diversidad de estilos que reflejan la continua renovación del arte.

El Museo Nacional de San Carlos está ubicado en avenida México-Tenochtitlan 50, colonia Tabacalera, alcaldía Cuauhtémoc. Se puede visitar de martes a domingo, de 10:00 a 18:00 h.