ARTES VISUALES

LABORATORIO ARTE ALAMEDA REÚNE EXPOSICIONES INDIVIDUALES DE SAID DOKINS, DEBORAH CASTILLO Y ANA HERNÁNDEZ

Boletín No. 896 - 24 de julio de 2025
  • Abordan temas como el territorio, la identidad, la memoria urbana y la conexión con lo ancestral, desde diversas perspectivas artísticas
  • Las muestras estarán abiertas al público del 25 de julio al 26 de octubre de 2025

La Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura y el Laboratorio Arte Alameda (LAA), presenta tres exposiciones individuales de los artistas contemporáneos: Said Dokins (Inscripciones), Deborah Castillo (Gran Basamento) y Ana Hernández (Ná’ Reza [Mano Rota]), con piezas creadas exprofeso para dicho recinto.

Del 25 de julio al 26 de octubre de 2025, el público apreciará instalaciones monumentales, videos, esculturas y performances que exploran el lenguaje, el territorio y la permanencia histórica, temas que cada artista analiza desde su perspectiva creativa y con el uso de materiales diversos que unen el pasado con el presente.

Said Dokins: Inscripciones

Said Dokins (Ciudad de México, 1983) es un artista multidisciplinario, cuya obra explora el lenguaje, la memoria y la identidad a través de la caligrafía, el grafiti, el gesto corporal y la tecnología.

En Inscripciones presenta obras que retoman la escritura como trazo, memoria y desplazamiento, a través de piezas lumínicas, caligrafías invisibles y procesos biotecnológicos desarrollados en conjunto con científicos del Instituto Tecnológico de Monterrey.

Inscripciones se plantea como un sistema vivo, activado por los desplazamientos del artista y las condiciones cambiantes del entorno urbano; las obras señalan y enfatizan la tensión entre signo y superficie, presencia y borradura, en distintas escalas y lenguajes. La serie “Elografías de la memoria” ofrece videos –en colaboración con el fotógrafo Leonardo Luna– de las intervenciones realizadas en espacios públicos, como son los monumentos históricos. 

Durante un recorrido, Dokins explicó que se tendrán seis intervenciones públicas más y durante el tiempo que esté la exposición se actualizarán los videos.

La nave principal del LAA tuvo una intervención con un mural de gran formato, en el cual utilizó tinta de seguridad para la inscripción de diferentes códigos que, como explicó, tienen que ver con el origen de la escritura que únicamente se aprecian a través de una frecuencia lumínica ultravioleta.

“El interés por exponer aquí es precisamente apropiarme del lugar, por la magnitud del espacio, por el recinto mismo, porque una de mis formas emblemáticas es la intervención caligráfica de gran formato. Si lo vemos con luz normal no existe el mural, porque solamente aparece cuando se prende la luz ultravioleta. La idea es que perviva, que quede escondido en el recinto como una especie de tatuaje invisible y que se pueda activar eventualmente”. 

La exposición se acompaña de la videoinstalación De tripas corazón, una serie de retratos audiovisuales generados en tiempo real mediante una interfaz de neurolectura portátil desarrollada por Dokins en colaboración con un equipo interdisciplinario de científicos y artistas.

Deborah Castillo: Gran Basamento

Bajo la curaduría de Jesús Torrivilla, Gran Basamento es un espacio para la discusión en torno a la historia, la memoria y el poder, que funciona como articulador de una serie de actividades públicas, que incluye “Discurso para las masas”, un concierto de ópera contemporánea para dos cantantes con música original de la compositora Lanza; se presenta en dos funciones durante el periodo la muestra.

Gran Basamento transforma la Antigua Capilla de Dolores en un sitio de experimentación performática, en el que se construye un cuerpo en diálogo con el mural permanente Los informantes de Sahagún (1948), de Federico Cantú. La pieza hace referencia al espacio piramidal circular de Cuicuilco para crear un escenario en el que –a decir de Deborah Castillo– dialogue con la historia de México y el cual trabaja desde antes de la emergencia por COVID-19.

“Esta pieza tiene que ver con los discursos de derecha y de izquierda, y de esos mensajes convertidos en ruido. Los argumentos políticos contemporáneos que ya no dicen nada y que yo siento que están prendidos en una especie de loop histórico que no avanza ni retrocede”.

La instalación se propone como un eje de reunión e intercambio comunitario que trasciende las polaridades del discurso político y los extremos ideológicos, para profundizar en la violencia del poder en la historia y la memoria de América Latina.

Deborah Castillo (Caracas, Venezuela, 1971) es una artista multidisciplinaria que radica en la Ciudad de México. Su trabajo, atravesado por la migración y el desplazamiento, explora el juego, la ambigüedad y la experimentación como formas de invitar al espectador a construir sus propios significados. A través de performances, acciones e instalaciones, problematiza las representaciones del poder, el género y la historia.

Ana Hernández: Ná' reza [Mano rota]

Ana Hernández (Santo Domingo Tehuantepec, Oaxaca, 1991) utilizó los comixcales para reflexionar sobre los ciclos de tiempo, la importancia de la preservación de los recursos naturales y los procesos transmitidos por generaciones como una vía alterna hacia la soberanía alimentaria, fuera de los márgenes industriales.

Hernández se enfoca en temas como el territorio, la migración y la identidad. Ná’ Reza [Mano rota], su primera exposición individual institucional, señala la profunda desconexión actual con los relatos, saberes y prácticas ancestrales que sostienen una relación sagrada con la tierra. A través de diversos medios –instalaciones, esculturas cinéticas, video y serigrafía– las obras giran en torno a un objeto central: el comixcal.

La tradición alfarera transforma el barro en objetos cotidianos mediante su quema. Los comixcales son hornos de barro activados con leña, utilizados en las cocinas del Istmo de Tehuantepec para la cocción del maíz, alimento fundamental en México desde tiempos prehispánicos.

Ana Hernández (Santo Domingo Tehuantepec, Oaxaca, 1991) es una artista visual que aborda la migración, la lengua y la familia desde una perspectiva comunitaria, con énfasis en el intercambio de saberes y la reivindicación del arte desde los pueblos originarios. Su práctica parte de vivencias personales que se transforman en procesos colectivos, ligados a la oralidad, el territorio y la vida cotidiana.

Las exposiciones estarán abiertas al público del 25 de julio al 26 de octubre de 2025, de martes a domingo, de 9 a 17 horas.

Laboratorio Arte Alameda se encuentra en Dr. Mora 7, colonia Centro Histórico, alcaldía Chuautémoc.

Para más información sobre el programa de actividades paralelas, se puede consultar a través de las redes sociales: Laboratorio Arte Alameda (Facebook) y @artealameda (Twitter e Instagram).