ARTES VISUALES

EL MUSEO NACIONAL DE SAN CARLOS ALBERGA UN ACERVO ÚNICO DE ARTE EUROPEO DEL SIGLO XIV AL XX

Boletín No. 1347 - 30 de octubre de 2025
  • Integra 2,200 obras de los grandes representantes de los estilos pictóricos europeos
  • La colección se presenta bajo diversas lecturas curatoriales a través del programa de exposiciones del recinto

El Museo Nacional de San Carlos (MNSC) del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) alberga uno de los acervos más importantes de arte europeo en México, integrado por pinturas, esculturas, estampas y dibujos que permiten recorrer la historia de las corrientes estilísticas del siglo XIV al XX. La riqueza histórica, temática y técnica de este acervo brinda al público un amplio panorama con obras que destacan por su belleza y alta calidad artística.  

“Es una colección que reúne diversos géneros. La intención fue generar un acervo que sirviera de modelo para los estudiantes de la Academia de San Carlos. Dentro de las colecciones de arte público que hay en México, este acervo es único porque, si bien hay obra de arte europeo en otras colecciones, este conjunto tiene una orientación académica respecto a los periodos artísticos”, comentó en entrevista Jorge Reynoso Pohlenz, director del MNSC.

Señaló que el acervo está conformado por 2,200 obras entre pintura y escultura. “Una de las bases de la colección fue generar un gusto entre los estudiantes de la Academia de San Carlos, y parte del ejercicio académico consistía en copiar modelos. Tenemos obras de Leandro Izaguirre, quien era miembro de la Academia e hizo copias de modelos de obras clásicas, entre ellas de Goya o Rubens, pero también hay piezas originales de maestros como Francisco de Zurbarán”.

La colección combina obras de grandes maestros y otras inspiradas en ellos. “Hay obra del gótico tardío, como un altar anónimo de la escuela catalana del siglo XIV titulado Escenas de la vida de San Lázaro; la obra Sagrada familia, de Sandro Botticelli, del siglo XV y perteneciente al Renacimiento; y Virgen enseñando a leer al niño, de Luis de Morales ‘El Divino’, de mediados del siglo XVI y del manierismo”.  

Citó también la pieza Madona con el niño o La virgen de la leche, de Jacopo Carucci (el Pontormo), realizada en 1520 como parte del manierismo; María Magdalena penitente, creada por Francisco de Zurbarán durante la primera mitad del siglo XVII y correspondiente al periodo barroco; San Juan Bautista niño, de autor desconocido activo en Roma en 1873, de estilo neoclásico; y La demencia de Isabel de Portugal, de Pelegrín Clavé (1855), de estilo romanticismo-historicismo.

“Son obras representativas de distintos momentos del arte occidental y han tenido influencia en el arte mexicano, aunque también hubo artistas que reaccionaron a esta tradición europea creando un arte nacional. Para exhibirlas organizamos exposiciones de la colección que duran seis meses o un año, y vamos cambiando las obras porque tratamos de ofrecer distintas lecturas curatoriales, como en la muestra Desordenar la colección desde el género, que es una revisión a partir de la perspectiva de género”, señaló.  

Este importante acervo, único en su tipo, se puso al alcance del público desde la fundación del museo en 1968, al exhibir un conjunto heredado de las colecciones de la Real Academia de las Tres Nobles Artes de San Carlos de la Nueva España y de piezas procedentes de conventos clausurados. A partir de la década de los setenta, el acervo se ha enriquecido con las donaciones y adquisiciones realizadas por el INBAL y el patronato del museo. Las más recientes, efectuadas en 2012, incluyen un óleo del artista español Andrés de Concha y una pintura del mexicano Juan Patricio Morlete Ruiz.