La soprano Zulyamir Lopezríos y el pianista Santiago Piñeirúa interpretarán música mexicana

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- El sábado 9 de septiembre a las 13:00 en la Fonoteca Nacional; entrada libre
“Me fascina la música mexicana. Interpretarla representa para mí una oportunidad extra de agregarle la sensibilidad de nuestro pueblo. En esta época tenemos que empoderarnos de lo positivo de nuestro México, de las grandes obras y de los grandes compositores que han hecho algo por el país; inspirarnos en ellos para hacer lo que podamos en el ámbito de cada uno, y la música mexicana es sensacional para lograr esto”, expresó en entrevista la soprano Zulyamir Lopezríos, quien, junto con el pianista Santiago Piñeirúa, ofrecerá un programa de música mexicana el sábado 9 de septiembre a las 13:00 en la Fonoteca Nacional.
“El objetivo es mostrar la calidad de nuestra música y ofrecer al público una gama de diversos autores mexicanos en estas fiestas patrias de septiembre; piezas de primera calidad que se han escrito en nuestro país a lo largo de los años. La gente tendrá un gran momento musical”, refirió la cantante.
El programa de este concierto gratuito está conformado por Dibujos sobre un puerto de José Rolón, Cinco canciones para niños de Silvestre Revueltas, Décimas mortales y Canción desesperada de Carlos Jiménez Mabarak, Calla de Jorge del Moral, La peña de Manuel M. Ponce, Xochimilco de María Teresa Lara, China de Mario Talavera y Júrame de María Grever.
La también maestra de canto de la Escuela Superior de Música del Instituto Nacional de Bellas Artes afirmó que la música nacional maneja diversas estéticas y que en el programa que ofrecerán se abordan cuatro de ellas: la música afrancesada de fines del siglo XIX y principios del XX de José Rolón, la estética nacionalista con ritmos mexicanos de Silvestre Revueltas, la búsqueda de lenguajes propios de Carlos Jiménez Mabarak y la influencia popular. “Es una gama colorística, rítmica y estética de la música mexicana”.
Agregó que interpretar música de nuestro país implica hacerlo de la mejor manera posible. “Si nos pulimos al ofrecer música internacional de todos los tiempos, el compromiso es más grande con nuestra música. Tenemos la ventaja de haber nacido y crecido con la estética musical de nuestro país y la entendemos muy bien, por lo que solo se necesita echar a volar nuestra imaginación y tener sinceridad como intérpretes para abordar toda esta temática preciosa”.
En cada una de las canciones del programa, el desafío musical y vocal es grande, aseveró. “El registro de todas las piezas es muy amplio, desde notas muy graves hasta agudas, además de la serie de matices que exigen. Un reto personal cuando interpreto música mexicana es no emocionarme demasiado porque esto cierra la garganta. Son canciones muy conmovedoras, pero hay que controlar la emoción para seguir cantando y que el público sea el que se emocione más”.
Acerca de Santiago Piñeirúa, señaló que se trata de un artista con una técnica arrolladora y una gran musicalidad. “Es un joven que se está abriendo paso en el ámbito artístico nacional de manera muy fuerte, además de ser un buen amigo. Juntos hemos presentado este programa en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes y en el Museo Nacional de Arte, y la gente sale muy motivada, conmovida y llena de energía. Tendremos la dicha de presentarlo, también en septiembre, en El Cairo, Egipto”, finalizó.
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