La Ópera de Bellas Artes fue galardonada en la decimosexta entrega de las Lunas del Auditorio Nacional
- Por el espectáculo Lucia di Lammermoor, que presentó en febrero con gran aceptación por parte del público
- Nos sentimos contentos y halagados de recibir esta presea, expresó la directora artística Lourdes Ambriz
La Ópera de Bellas Artes, con el montaje Lucia di Lammermoor, fue galardonada en la categoría Espectáculo Clásico en la decimosexta entrega de las Lunas del Auditorio Nacional, que se realizó en el coloso de Reforma.
En representación de Lidia Camacho, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes, Roberto Vázquez, subdirector general de la institución, recibió dicho premio.
En el evento, Lourdes Ambriz, directora artística de la Ópera de Bellas Artes señaló que recibir la Luna del Auditorio es un honor y una distinción significativa. “El hecho de recibir esta presea nos hace sentir muy agradecidos y halagados porque es un estímulo importante para nosotros”.
El espectáculo Lucia di Lammermoor inició las actividades de la Ópera de Bellas Artes en 2017. Las funciones se efectuaron en el Palacio de Bellas Artes durante febrero, con la participación del destacado tenor Ramón Vargas y la soprano Irina Dubrovskaya, la Orquesta y Coro del Teatro de Bellas Artes y un elenco importante de jóvenes que inician su carrera operística.
Acompañada de la música de Gaetano Donizetti, se trata de una ópera dividida en tres actos, cuyo argumento plantea la tragedia de la joven Lucia Ashton, quien se ve envuelta en la rivalidad de dos clanes, los Ashton y los Ravenswood, lo que impide la unión de dos amantes.
El libreto es de Salvatore Cammarano, basado en la novela The Bride of Lammermoor de Walter Scott, el cual fue transformado de manera interesante al mantener las mismas líneas dramáticas y su entrecruce con el manejo del mundo supersticioso, el poder y el amor de los personajes protagónicos, Lucia y Edgardo, pero con una variación del personaje villano.
“En la Ópera de Bellas Artes tenemos como misión una especie de contradicción muy difícil pero que hemos luchado por lograr y conseguir: mantener dentro de nuestro repertorio las obras clásicas que puedan adaptarse a una propuesta atrevida pero que siempre mantenga el respeto hacia la obra en sí, hacia el argumento y su esencia.
“De manera que el trabajo pueda ser algo novedoso y al mismo tiempo respetuoso y tradicional para acceder a la modernidad sin dejar de tener los pies bien puestos en el origen de las obras y la época de su creación”, explicó Ambriz.
Lucia di Lammermoor fue un ejemplo muy típico donde toda la puesta en escena era una apuesta a algo ambientado completamente en época pero visto desde un ojo moderno, por eso contamos con una escenografía hermosa, con cuadros que cobraban vida, agregó.
La también cantante comentó que fue un montaje que requirió del trabajo, esfuerzo y amor de mucha gente y de casas de ópera hermanas. “En esta obra contamos con la participación del equipo del Palacio de Bellas Artes y de la producción original del Teatro Bicentenario de León, además de la participación de los artistas, los grupos artísticos de Bellas Artes y toda la gente que trabaja para lograr el milagro de la ópera”.
Es importante mencionar que dentro de la decimosexta entrega de las Lunas del Auditorio Nacional también estuvieron nominados, dentro de la modalidad de Espectáculo Clásico, la Orquesta Sinfónica Nacional con el Concierto Navideño, bajo la dirección concertadora de Carlos Miguel Prieto, y en la categoría de Ballet, la Compañía Nacional de Danza con El Cascanueces, El lago de los cisnes y Giselle.
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