Revisiones del acervo II. Selección de arte popular presenta un conjunto de piezas de la colección de arte popular que reunió Diego Rivera.

Diego Rivera viajó en 1906 a Europa para realizar estudios con el pintor español Eduardo Chicharro. Además, recorrió diferentes lugares del continente para finalmente regresar a México en 1921. En ese año, se incorporó a la organización de la muestra Las artes populares en México, organizada por la Secretaría de Industria y Comercio, en el marco de las conmemoraciones por el centenario de la consumación de la Independencia. Para ello visitó diversos lugares de México, recorriendo mercados y talleres, donde adquirió algunas piezas que incorporó a su colección, principalmente de cartonería, alfarería, cerámica, juguetes y tejidos de fibras vegetales.

A principios de 1934 el artista se instaló en su estudio de San Ángel en donde fue consolidando su acervo que se sumó al conjunto de obras y proyectos que realizó en ese espacio. Tuvo un especial interés en el arte popular mexicano, no sólo por su valor utilitario, sino también por sus cualidades estéticas y su carga simbólica o ritual.

Las obras provienen de diferentes entidades, principalmente Chiapas, Ciudad de México, Estado de México, Guerrero, Jalisco, Michoacán, Oaxaca, Puebla y Tlaxcala, y reúnen técnicas artesanales como la cartonería y el trabajo con fibras naturales, además de objetos diversos como juguetes, platos y bateas tradicionales, entre los que destacan los realizados en los talleres de Metepec, Estado de México, y Tzintzunzan, Michoacán.