Manuel Tolsá, el mayor exponente del estilo neoclásico en México

·        Se cumplen 203 años del fallecimiento del célebre arquitecto y escultor, ocurrido el 24 de diciembre de 1816

·        En 1791, Tolsá fue comisionado por el rey Carlos IV para dirigir el área de escultura de la Academia de San Carlos de la Nueva España

Conocido por el diseño de diversos monumentos históricos, entre ellos el Palacio de Minería y el Palacio del Marqués del Apartado, así como la famosa estatua ecuestre de Carlos IV El Caballito, Manuel Tolsá fue uno de los arquitectos y escultores más destacados de principios del siglo XIX en la Nueva España.

Nació en Valencia, España, el 4 de mayo de 1757. Estudió en las reales academias de San Carlos en su ciudad natal y de San Fernando en Madrid; fue discípulo en arquitectura de Bartolomé Ribelles, Vicente Gascó y Antoni Gilabert; y en escultura de Juan Pascual de Mena.

Durante sus 59 años de vida, Tolsá se desempeñó como escultor de la cámara del rey, ministro de la Suprema Junta de Comercio, Moneda y Minas, y académico en San Fernando.

En 1791, Tolsá fue comisionado por el rey Carlos IV para dirigir el área de escultura de la Academia de San Carlos de la Nueva España, institución a la que trajo una colección de réplicas vaciadas en yeso de las principales obras españolas y vaticanas. Posteriormente, obtuvo el título de Académico de Mérito en Arquitectura.

Ya instalado en la Ciudad de México, el arquitecto tuvo la encomienda de supervisar las obras de drenaje y abastecimiento de aguas, así como la reforestación de la Alameda Central. Por ambos trabajos no recibió ningún pago. Entre otras ocupaciones, se dedicó a la fabricación de muebles y fundición de cañones.

Entre sus proyectos más importantes está la conclusión de las obras de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México en 1813, que contemplaba la decoración de las torres y el frontispicio con las esculturas la Fe, la Esperanza y la Caridad, el diseño de la cúpula, las balaustradas y los zócalos de las cruces del atrio.

El Palacio de Minería es considerada obra cumbre del arte neoclásico en México. Esta construcción simétrica, con amplios espacios y cubos de luz, es una de las más visitadas por turistas mexicanos y extranjeros, ubicada en la calle de Tacuba en el Centro Histórico de la CDMX, frente al Museo Nacional de Arte.

En la explanada de este último inmueble se encuentra la estatua conocida como El Caballito, pieza de casi seis toneladas de peso dedicada a Carlos IV, la cual ha tenido diferentes ubicaciones: en el Zócalo, en Paseo de la Reforma, en Bucareli y ahora en el Centro Histórico.

El Antiguo Palacio de los Condes de Buenavista, hoy Museo Nacional de San Carlos, es otra de las obras hechas por Manuel Tolsá, en la que fusiona los estilos neoclásico y barroco. 

También se le recuerda por el Hospicio Cabañas, en Guadalajara, Jalisco; la celda de la marquesa de Selva Nevada en el Convento de Regina Coeli y el Altar principal de la Catedral de Puebla, entre otras más.

Se dice que fue tal su influencia en la Nueva España que a su estilo neoclásico se le bautizó como “estilo Tolsá”.

En 1794, contrajo matrimonio con Luisa Sanz Girón, de origen veracruzano, con quien tuvo nueve hijos. Falleció en 1816 a causa de una úlcera gástrica el 24 de diciembre de 1816. Al parecer, sus restos reposan en la iglesia de la Santa Veracruz.

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