Imágenes de viento, lluvia y sonido cristalizado, obra de Orlando Jacinto García inspirada en el poder de la naturaleza

• La Orquesta de Cámara de Bellas Artes, a cargo de Luis Manuel Sánchez, repetirá el programa el domingo 25 de junio en el Conservatorio Nacional de Música

En mi música no existe el silencio, sino resonancias, aseguró Orlando Jacinto García, cuya obra Imágenes de viento, lluvia y sonido cristalizado para guitarra y orquesta de cámara fue estrenada por la Orquesta de Cámara de Bellas Artes (OCBA), bajo la dirección de Luis Manuel Sánchez, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.

Con este estreno, que contó con la participación del guitarrista Jaime Márquez, concluyó la temporada 2023 de la agrupación musical del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), instancia de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México.

Antes de la interpretación, el compositor cubano-estadounidense subió al escenario y explicó que deseaba que fuera estrenada por la OCBA "porque es una de las orquestas más importantes del país" e interpretada por Márquez, “gran amigo y virtuoso de la guitarra”.

Sobre su obra dijo que se trata de una composición hecha en 2021 como parte de una residencia artística en Cayo Hueso, lugar ubicado al sur de Florida que posee una belleza extraordinaria, por estar ubicado en medio del océano atlántico y el Golfo de México.

En ese lugar, agregó, ocurren huracanes tremendos y en una ocasión, mientras pernoctaba en una hermosa casa de madera, ocurrió uno de estos fenómenos meteorológicos y estaba en medio. No tenía miedo porque ya había pasado otras situaciones similares.

Esto me dio pie para crear Imágenes de viento, lluvia y sonido cristalizado para guitarra y orquesta de cámara, una obra que al igual que mis anteriores composiciones, posee una fuerza intensa, ya que quise plasmar los sonidos y el poder de la naturaleza. Compuse la obra y traté de incluir esta experiencia en ella. 

Tras explicar el sonido que transmite cada instrumento, Jacinto García dijo: “Para mí es muy importante cambiar la percepción del tiempo, incluso no sé si la hice en dos minutos o en dos horas”.

Al final de la interpretación de la pieza musical, que tiene una duración de 22 minutos, los aplausos del público no se hicieron esperar y el compositor felicitó y saludo al guitarrista, al concertino y al director de la OCBA.

Luego del intermedio, la OCBA interpretó la pieza Souvenir de Florencia, op. 70, de Piotr Ilich Chaikovski, un auténtico aquelarre musical de media hora de duración.

La OCBA repetirá este concierto el domingo 25 de junio al mediodía en el Conservatorio Nacional de Música del Inbal, con entrada libre.